¿Cómo saber si un texto fue hecho por ChatGPT?

ChatGTP, software de inteligencia artificial (IA) capaz de generar contenido de texto a través de comandos, es utilizado diariamente por personas de todo el mundo para crear artículos, guiones, entre otros contenidos que están tan bien escritos, que es difícil saber si un texto fue hecho por un humano o por ChatGPT.

Ya hemos hablado de esta inteligencia artificial otras veces, incluso enseñando cómo usar, para qué sirve y cómo se usa ChatGPT.

Sin embargo, el uso de este chatbot no siempre está bien visto en el entorno profesional, especialmente por parte de las empresas que contratan a creadores de contenidos. Para ayudarlos a identificar si un texto ha sido creado por inteligencia artificial, han surgido herramientas como ZeroGPT, Copyleaks y Writer.

Por ello, en este artículo mostraremos cómo detectar la originalidad de la obra y saber si un texto ha sido hecho por ChatGPT.

¿Cómo funcionan los detectores de IA?

En general, no es posible saber con certeza si un texto fue hecho o no por una IA como ChatGPT. Esto se debe a que, por el momento, OpenIA no revela públicamente qué es exactamente lo que crea la herramienta.

Lo que hacen los detectores es utilizar otra IA para calcular la probabilidad de que un texto haya sido generado por IA. Esto es posible porque el patrón lingüístico de un texto escrito por un humano es diferente al escrito por una IA. Es importante señalar que estas herramientas pueden mostrar errores, especialmente en textos más cortos, que son más difíciles de identificar.

Las herramientas de detección de IA, se encuentran en fase de pruebas, así como el propio ChatGPT. Por ello, pueden presentar imprecisiones. Además, trabajan mejor con textos en inglés que en otros idiomas.

1. ZeroGPT

ZeroGPT es una herramienta desarrollada por Edward Tian, de solo 22 años, a finales de 2022. Para averiguar si un texto ha sido creado por IA, el software mide la complejidad del texto y diferentes variables para determinar si ese lenguaje procede de un ser humano o de una IA.

Debido a su gran precisión, la empresa responsable describe el software como “la herramienta de detección de chatbots más avanzada y fiable” disponible actualmente en el mercado. Veamos dos ejemplos de cómo funciona ZeroGPT.

Primero vamos a pegar un texto generado por humanos y luego contenido generado por ChatGPT para comprobar cómo funciona ZeroGPT.

Texto generado por humanos:

Texto generado por ChatGPT:

Como se ha visto, la herramienta ZeroGPT funcionó perfectamente, siendo capaz de detectar, en ambos ejemplos, si el texto fue hecho por un humano o por ChatGPT.

2. Copyleaks

CopyLeaks es una popular herramienta de detección de IA. Con una interfaz clara e intuitiva, basta con pegar el texto mostrado y esperar la verificación. Como destaca la empresa creadora del proyecto, Copyleaks tiene una precisión de más del 99% en la detección de texto realizada por inteligencia artificial, lo que la hace teóricamente superior a Zero GPT.

3. Writer

Completando nuestra lista de cómo saber si un texto fue hecho por ChatGPT tenemos a Writer. Es una herramienta basada en una red neuronal capaz de detectar contenido generado por IA. Puedes comprobar hasta 1500 caracteres a través de la herramienta, que presenta un porcentaje de posibilidades de que ese texto haya sido creado por IA.

La herramienta, sin embargo, es limitada, por lo que no es la mejor tecnología para contenidos más largos.

¿Cómo saber si un trabajo académico o escolar fue hecho por ChatGPT?

Con la revolución ChatGPT, es posible crear trabajos académicos y escolares rápidamente y con poco esfuerzo. Sin duda, esto se ha convertido en una preocupación para muchos profesores y educadores de todo el mundo.

Algunos videos virales en TikTok enseñan cómo utilizar la herramienta para producir un Trabajo de Grado completo con unos pocos comandos en ChatGPT. Por ello, las herramientas para la detección de inteligencia artificial deberían cobrar cada vez más importancia con el tiempo. Una buena estrategia es que los profesores utilicen algunas de las herramientas anteriores para averiguar si el trabajo del alumno ha sido escrito por la herramienta de IA.

ChatGPT y Google

El uso de la inteligencia artificial para la creación de textos está provocando grandes discusiones en el mercado del SEO (Search Engine Optimization). Las herramientas de IA tendrán sin duda un gran impacto en los sitios web y en la producción de contenidos, por lo que es importante entender cómo un texto hecho por ChatGPT pueden afectar a los sitios web en Google.

Inicialmente, se entendía que el contenido generado por inteligencia artificial podría afectar negativamente a la clasificación de los sitios web. Sin embargo, Google ha aclarado recientemente que mientras el contenido se cree para el usuario y, en consecuencia, sea de alta calidad, esto no supone un problema.

“Como ya hemos dicho cuando se nos ha preguntado por la IA, los contenidos creados principalmente para posicionarse en los motores de búsqueda, sea como sea, van en contra de nuestras directrices. Si el contenido es útil y se crea en primer lugar para las personas, no hay problema”, afirmó la cuenta oficial de Google en Twitter.

De este modo, a medida que los sitios se vuelven más eficientes en la producción de contenidos, el contenido generado por IA puede incluso mejorar la experiencia del usuario en Google. Por cierto, si quieres saber más sobre cómo monetizar tus habilidades con ChatGPT lee este artículo nuestro sobre formas de ganar dinero con ChatGPT.

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El futuro de la detección de IA

Es importante destacar que se trata de una carrera de evolución constante entre las IA. Mientras que los generadores de texto evolucionan para tener un lenguaje más parecido al natural, los detectores de IA se mejoran para detectar de forma más sutil el texto generado por IA.

La única forma de estar seguros al 100% de que un texto fue hecho por ChatGPT sería que OpenIA facilitara públicamente el contenido creado por los usuarios. Sin embargo, hasta ahora no es el caso.

Este es todavía un mercado muy joven, y seguramente veremos evoluciones en las discusiones en el futuro.